DARTH MAUL EPISODIO I EPISODIO II EPISODIO III EPISODIO IV EPISODIO V EPISODIO VI
CLONE WARS
Darth Maul fue un arma forjada para un solo propósito: la destrucción de los Jedi, aunque para el maestro de Maul, Darth Sidous, solo representaba una pieza más en el tablero de ajedrez de sus oscuros planes. Para Sidious, Maul no era ni un amigo ni un hijo substituto, él era simplemente una herramienta. Cuando Maul fue vencido en Naboo, Sidious no se preocupó mucho, y como un sable roto, lo apartó hacia a un lado y buscó un reemplazo. La historia de Maul es oscura como las mismas profundidades inexploradas del espacio, Maul era de la raza zabrak, del planeta Iridonia, aunque mucho de su pasado es desconocido, fue raptado de su planeta natal siendo un infante por Darth Sidious, que quería reclamar suyo al niño sensitivo en la Fuerza antes que lo hicieran los Jedi. Sidious fue un maestro cruel y Maul no tuvo una niñez verdadera, pasaba cada momento tratando de auto-superarse para ser más fuerte, más poderoso, más listo y más rápido. El entrenamiento físico era exhausto, y la doctrina psicología que fue utilizada en él era atemorizante aunque a la misma vez enriquecedora para sus propósitos. En una ocasión como castigo al ser mordido por error por una feroz criatura, Sidious llenó el cuarto del joven Maul y lo encerró en él hasta que matara a cada una de ellas. En la guarida oculta de Sidious en Coruscant y en planetas desérticos de toda la galaxia, Maul practicó las artes marciales, perfeccionó la puntería, y la utilización de armas de combate personal. Aprendió a utilizar el sable de luz y el lanvarok de los Sith e incluso el arte de la lucha con dos sables de luz, uno en cada mano, en el estilo Jar’Kai, completando su fase con las misteriosas artes del Lado Oscuro de la Fuerza.
Algunos años antes de la Batalla de Naboo, Darth Maul alcanzó el último paso en su arduo y sangriento entrenamiento. Su maestro lo envió a un planeta cubierto de desiertos y montañas del Borde Exterior de la Galaxia y le ordenó sobrevivir por un mes frente a una legión entera de droides asesinos. Maul sobrevivió, pero aun faltaba su prueba final… luchar contra su maestro en un duelo de sables de luz. Sidious manejó siniestramente los sentimientos de odio de Maul y lo dirigió al vasto poder del Lado Oscuro de la Fuerza, y en ese momento Darth Maul se convirtió en un Señor Oscuro del Sith.
Maul siempre respetó a su maestro y a las antiguas tradiciones de los Sith, el Lado Oscuro era todo lo que él conocía, sin este él, no poseía nada. Mientras que muchos Sith anteriores a él, como Exar Kun y Naga Sadow, bajo una antigua tradición se habían puesto tatuajes en sus nucas, Maul cubrió la totalidad de su cuerpo con tatuajes de intrincados diseños de color rojo y negro. En el Holocron Sith de su maestro Maul encontró planos para speeders Sith, droides de búsqueda o también conocido como droides sonda y un sable de luz de doble hoja y a partir de allí los construyó con increíble precisión. Utilizando la habilidad en la Fuerza denominada mecha-deru, Darth Maul personalizó un droide de protocolo llamado C-3PX y lo utilizó como un formidable droide de guardia para tareas personales. Siendo la “mano derecha” de Sidious, Maul realizo misiones secretas de asesinato e intimidación. Bajo las órdenes de su maestro viajó al planeta Dorvallla, donde secretamente hizo que dos compañías de minería disputaran entre sí, el caos que eso resultó dejo a Dorvalla inmerso en un caos listo para ser tomado por la Federación de Comercio, también permitió a Darth Maul utilizar su nuevo sable de luz de doble hoja contra oponentes vivos en vez de droides de entrenamiento, una experiencia que sin dudas disfrutó y le fue beneficiosa.
Luego de Dorvalla, Darth Maul recibió por parte de su maestro como obsequio un Sith Infiltrador, una nave que posee la distintiva habilidad de no se detectada. Armado con su nuevo arsenal, Maul paralizó al sindicato criminal Sol Negro al viajar a su centro de operaciones en Ralltiir y asesinó a cada uno de los miembros de su junta gobernante. Más tarde, Maul destruyó una fortaleza Bartokk en el mismo planeta, simplemente porque unos insectoides se habían cruzado en su camino.
Cuando un neimoidiano llamado Hatho Monchar, abandonó la Federación de Comercio llevando consigo información sobre los planes de invasión de Darth Sidious, este envió a Maul para que elimine al traidor. El trabajo probó ser más difícil de lo que Maul esperaba. Darth Maul asesinó a Monchar con facilidad, pero a medida que mas gente se exponía a la información que el neimodiano sabía, Maul tenia que agregar mas asesinatos a su lista. Mucho antes su tarea fue la de cazar a una Padawan Jedi llamada Darsha Assant y un vendedor de información llamado Lorn Pavan, a quienes persiguió por las altitudes de Coruscant, aunque terminó cumpliendo con todos los deseos de su maestro al “atar los cabos sueltos” en dicha tarea.
Mientras que Darth Maul disfrutaba al realizar sus sangrientas misiones, su verdadera meta era exterminar a los Jedi y llevar hasta las cenizas al Templo Jedi. Sí bien Maul no tenía la ambición de superar a su maestro, sabía que bajo la regla Sith de dualidad “un maestro y un aprendiz”, Sidious tendría que morir antes de que Maul pueda tener su propio aprendiz.
El momento de Maul para probarse a sí mismo como un Sith llego cuando su maestro le ordenó cazar a dos Jedi, Qui-Gon Jinn y Obi-Wan Kenobi en Tatooine y Naboo, mientras estos protegían a la fugitiva Reina Amidala. Talvez si no se hubiese topado con piratas togorian y moradores de las arenas hubiese tenido toda su fuerza para el conflicto final dentro del generador del Palacio de Theed, en vez de ello, luego de matar a Qui-Gon, Darth Maul subestimó fatalmente al Padawan de ese Jedi, Obi-Wan Kenobi, el aprendiz de Qui-Gon quien cortó por la mitad a Maul cayendo su cuerpo al vació. A pesar de esta perdida, Sidious había logrado su cometido, la perdida de su aprendiz era algo, pero no era nada comparado con la victoria de sus maquinaciones de poder, después de todo, buscaría un nuevo aprendiz Sith para seguir sus cometidos.