Como otros en la orden Jedi, Barriss Offee fue tomada por sus padres a temprana edad para alzarla en los confines del templo Jedi y las redes del Código Jedi. Desafiando el rígido aprendizaje de la doctrina Jedi, la joven Offee tenía un comportamiento impulsivo que hizo fruncir el ceño a los Maestros Jedi más conservadores. Mientras era reservada por naturaleza y no fácil de intimidar, había veces que ella prefería desenfundar su sable de luz que seguir los protocolos de la diplomacia. Sus intentos de sobre compensar su juvenil exuberancia a veces le daba aire de frialdad.
Como parte de la intriga un par de Ansionianos intentaron secuestrar a Ofee. Ella vio mas allá y se dio cuenta que eran manejados y los soltó a ambos, Bulgan y Kyaktha, no fueron maliciosos en su intento. Usaron sus talentos curativos en la Fuerza, ella podía curar los supuestos abductores de sus dolencias debilitantes, ganándose su gratitud y lealtad. Su amistad fue muy esperanzadora en el proceso de paz en Ansion, y alejo la amenaza de la secesión